Consultas
Mi trabajo se enfoca en la atención psiquiátrica a pacientes con depresión, ansiedad, trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), trastornos de conducta alimentaria (TCA), trastorno bipolar, trastorno límite de personalidad (TLP), trastorno obsesivo compulsivo (TOC), trauma – estrés post traumático, psicosis, esquizofrenia, irritabilidad e impulsividad y alteraciones del sueño.
En la primera consulta realizo una historia clínica completa, evaluando antecedentes médicos, medicamentos recetados y otros aspectos importantes del motivo de la consulta. Con todo esto, brindo un diagnóstico presuntivo y las posibles opciones de tratamiento.
Recuerda que no todos los trastornos de salud mental necesitan medicación, hay algunos que pueden ser tratados mediante la psicoterapia correcta y otros de manera combinada.
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El Trastorno por déficit de atención e hiperactividad se está diagnosticando con cada vez más frecuencia, no solo en niños y adolescentes, sino también en adultos. La inatención y la hiperactividad son problemas serios que suelen afectar la productividad de manera importante. Por ello, existen diferentes abordajes para su manejo, no solo a nivel farmacológico, sino también con apoyo psicoterapéutico.
Los trastornos de conducta alimentaria suelen pasar por desapercibido por varios años, generando consecuencias irreversibles en el organismo. Por eso, es vital un abordaje multidisciplinario, donde se trabaje de manera conjunta con diferentes especialistas como psiquiatra, psicóloga y nutricionista y donde se involucre también a la familia. La recuperación sí es posible, por lo que reconocer y pedir ayuda pueden ser los primeros grandes pasos hacia esa meta.
El trastorno bipolar es una condición en la que se presentan episodios de ánimo muy elevado o irritable y episodios donde el ánimo está muy bajo. Esto tiene repercusiones a nivel del pensamiento, de las emociones y de la conducta. Irritabilidad, euforia, pensamiento acelerado, poca necesidad de dormir e impulsividad suelen ser algunas de las características cuando alguien está en un episodio de manía/hipomanía y es importante considerar, desde la parte farmacológica, el tratamiento ideal para poder estabilizar el ánimo.
El trastorno límite de personalidad o también llamado borderline tiene como componente principal la desregulación emocional. Esto significa que suele haber dificultad para regular las emociones, que puede llevar a una persona a tener conductas problemas, como autolesiones. En este caso, el apoyo farmacológico va dirigido a las comorbilidades que pueden existir y, a la vez, la base fundamental del tratamiento suele ser la terapia dialéctica conductual
Como su nombre lo dice, este trastorno tiene dos componentes importantes: obsesiones y compulsiones. Por un lado, las obsesiones son todas las ideas, imágenes y pensamientos intrusivos que generan mucho malestar y que pueden ser de contenido sexual, sobre limpieza y orden. Por otro lado, las compulsiones son las conductas repetitivas que se realizan para eliminar o aliviar las obsesiones, como el lavarse las manos de manera frecuente, verificar que se ha cerrado la puerta con llave o contar de una manera específica. Con frecuencia, el TOC suele generar mucho malestar, por lo que es importante dar tratamiento oportuno a este cuadro.
Se considera evento traumático a toda experiencia puntual o sostenida en el tiempo que una persona ha vivido de manera directa o que ha sido testigo del mismo donde la integridad física, emocional, psicóloga o sexual se ha visto vulnerada.
Un episodio traumático puede ser vivido de distintas maneras por un individuo y puede pasar que el impacto sea de tal magnitud que llega a repercutir a nivel físico, emocional, cognitivo y conductual.
La base del tratamiento del trauma es la psicoterapia y el re procesamiento de lo que ha ocurrido. A la vez, mediante el apoyo de fármacos, podemos ayudar a que este camino sea más transitable y menos agobiante, por lo que si estás pasando por un momento difícil, no dudes en pedir ayuda.
La alteración o ruptura de la realidad, también conocida como psicosis, es un cuadro que puede estar presente en diferentes trastornos de salud mental. Algunos son pasajeros y otros son permanentes. Por lo tanto, es necesaria una evaluación precisa y brindar el tratamiento respectivo.
Trastorno mental grave que se caracteriza por la psicosis, que es la pérdida de la realidad y donde se afectan 3 componentes: el pensamiento, la afectividad y el comportamiento. Una persona con síntomas de esquizofrenia puede escuchar voces que los demás no y pensar que son reales, puede tener la idea de que alguien le quiere hacer daño o que puede pensar que alguien le roba sus ideas, aun cuando no hay pruebas de ello. Este cuadro requiere de tratamiento farmacológico y es importante un abordaje integral para el manejo.
Sentirse irritable o impulsivo es algo que experimentamos todos los seres humanos y que no es un problema como tal. Pero, a veces puede pasar que estas dos características están constantemente altas e intensas, llegando a afectar la relación con los demás e interfiriendo con los objetivos personales. Por lo tanto, una manera de regular la irritabilidad e impulsividad, además de trabajarlo en psicoterapia, es recurriendo a ciertos fármacos que nos pueden ayudar en este proceso.
Dormir es una actividad fundamental en nuestra vida, por lo que es preocupante que los problemas de sueño sean cada vez más frecuentes. No solo importa las horas que dormimos, sino también en qué momento lo hacemos y cómo es la calidad de este sueño. Tardarse mucho en quedarse dormido o despertarse varias veces durante la madrugada son algunos ejemplos de alteraciones del sueño. Dentro de lo que podemos hacer para mejorar este aspecto están las medidas de higiene del sueño y algunos medicamentos que pueden contribuir a que se regule de manera efectiva.